La instalación de mallas disipadoras o geodinámicas de ocho metros de largo, detuvieron los desprendimientos de lodo y piedras, provocados por los huaicos que afectan a pobladores y viviendas en Chosica.
Como medida de prevención por los huaicos que afectaron el año pasado a los pobladores que viven al borde de la quebrada Carosio, se realizó la instalación de estas mallas de acero. El sistema tuvo un costo aproximado de 4 millones de soles.
Aunque los dirigentes reconocen que no es la solución final, aseguran que con la segunda parte del proyecto, la protección para los poblados de Buenos Aires, Moyopampa y María Parado de Bellido, será óptima.
Una alternativa que ahora les da tranquilidad a los vecinos. Sin embargo, un equipo de 24 Horas, comprobó que en otras quebradas no cuentan con estas mallas geodinámicas. Un hecho que debe ser atendido de inmediato por las autoridades para evitar más tragedias.
