Puñetes, patadas, ataques verbales, entre otras agresiones, es a lo que están expuestos los fiscalizadores de la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) en su labor diaria por erradicar la informalidad de nuestras vías.
En diciembre del año 2024, Luis Enrique Ocsas Tumay, un taxista informal, no solo escapó de un operativo, sino que atacó a una fiscalizadora que se encontraba en el lugar con golpes e insultos.
Tras la agresión, la ATU denunció a Ocsas Tumay, al que hoy el Poder Judicial ha sentenciado de manera histórica con una condena de seis meses con 26 días que fue convertido a 206 días multas que equivalen a 679,80 soles que deberán ser abonados al tesoro público, además de una indemnización para la víctima.
ATU HA REALIZADO 27 DENUNCIAS
En los dos últimos años, la ATU ha realizado 27 denuncias que involucran a 67 fiscalizadores agredidos. Esperan que los procesos que aún se encuentran abiertos puedan tener un desenlace positivo, al igual que el caso en contra de Ocsas Tumay.
