La delincuencia no da tregua a los comercios en Comas. Esta vez, un spa sufrió un robo en el tiempo que la recepcionista almorzaba. La joven dejó el negocio solo para ir a tomar su refrigerio y un hampón que merodeaba por ahí aprovechó en forzar la puerta e ingresar a robar todo lo que pudo.
Lamentablemente, esta no es la primera vez que atentan contra el negocio. "Ya habíamos sufrido un robo también en el local de unas cuadras más arriba, hace como tres meses (…) la delincuencia está a la orden del día", indicó el dueño.
Asimismo, los vecinos comentan que dicha zona es prácticamente tierra de nadie ya que no hay patrullaje policial.