Un anciano murió calcinado, tras incendiarse la casa que cuidaba desde hace muchos años en la urbanización Santo Dominguito en Trujillo.
La rápida intervención de los vecinos permitió que otras dos personas, entre ellas una mujer que sufre de alteraciones mentales, no resultaran con ningún daño a pesar que las llamas avanzaban rápidamente quemando todo a su paso.
Las primeras investigaciones indican que el siniestro se originó cuando la hermana del hombre fallecido utilizó las llamas de un mechero para quemar desperdicios en el interior de la casa.
Los bomberos llegaron al lugar, pero debido a la poca presión de agua en la zona se dificultó el trabajo de los hombres de rojo, por lo que miembros de Defensa Civil y obreros del servicio de Gestión Ambiental tuvieron que unir esfuerzos para apagar el fuego.
