La Iglesia católica de Chile confirmó que el sacerdote Gerardo Joannon participó en la entrega en adopción de dos bebés sin el conocimiento de sus madres, y que incluso mantiene una "relación inapropiada" con una de ellas hasta la fecha.
Se conoce que Joannon también está siendo investigado por entregar ilegalmente en la décadas de los 70 y los 80 a un número indeterminado de menores para su adopción.
Cabe señalar, que los niños eran hijos de madres solteras a quienes habrían dicho que los bebés habían muerto. El sacerdote incluso celebró durante años misas de difuntos por ellos sabiendo que los menores no estaban muertos.