La Sala Penal Nacional dictó hoy prisión preventiva por 18 meses para Benedicto Jiménez, investigado por lavado de activos al integrar la red del prófugo empresario Rodolfo Orellana.
Con esta decisión, el coronel en retiro, que había salido en libertad a mediados de julio, volverá a ser detenido y llevado a un centro penitenciario para que desde ahí afronte el proceso en su contra.
La resolución señala que como fundamentos para dictar prisión contra Jiménez Baca está, no concurrir a las citaciones de la Fiscalía, no cumplir con remitir la documentación requerida “constituyendo un claro indicador renuente del investigado en coadyuvar con la indagación”.
Además, la sala acogió el pedido de la fiscal Liliana Briceño para aumentar de 15 a 18 meses la prisión preventiva contra Rodolfo Orellana y su hijo adoptivo, Churchill Orellana por graves acusaciones de corrupción.
