Los hechos se produjeron cuando un grupo de maestros y padres de familia, intentaron tomar la sede de la Dirección Regional de Educación, exigiendo la renuncia de su directora Miriam Villegas Meza.
Los policías se enfrentaron a los manifestantes con bombas lacrimógenas. Varios de los docentes, actualmente en huelga, y padres de familia que ingresaron en el local regional quedaron detenidos.
Los gases lacrimógenos llegaron hasta el local de un centro educativo inicial y afectaron a varios niños, quienes en medio de lagrimas y muy asustados fueron retirados por sus padres.
Villegas Meza presentó su renuncia horas después ante la radicalización de las protestas que ya llevaban 18 días.